21.10.04

La compresión del tiempo

Levantas la mirada, el cielo esta grisaceo, vacío y deprimente como todos los días de tu vida que puedes recordar. El suelo no está, las paredes se fueron, todo es cielo. El espacio ya se ha compactado, y ese sabor amargo que creiste no volver a sentir vuelve a recorrer por completo tu cuerpo y todos tus sentidos. El solo recuerdo de anoche te destroza la cabeza. ¿Habrá sido verdad? Tus últimos años han sido una locura y ya no puedes diferenciar entre lo que sucede y lo que es delirio, entre el sueño y la realidad, entre lo que ves y lo que es, entre la historia y el pasado. Tratas de recomponer algunas escenas, pero los ruidos y los disturbios no te permiten hacerlo. Te alejas un poco, querés ver todo un poco mas claro, querés ver las cosas desde afuera, desde otro ángulo. Pero es imposible. Te miras el brazo, las manos, los pies. Aunque no puedes dilucidar una idea entiendes y comprendes que tu vida es un desastre. Te sientes vacío, desnudo, dudas si tu alma sigue a tu lado o si se perdió en la inmensidad del espacio. La lucidez te vuelve a abandonar y el olor de los buenos años ya no es tan perceptible. Tu último tiempo fue una caida libre, una colisión a la velocidad de la luz, y la mano que te venía ayudando ya no esta ahí para vos. No esta ahi ni para vos ni para tus amores, ni para vos ni para tus rencores, ni para vos ni para...
Un espejo cruza el cielo, tratas de girar la cabeza para mirarte en él pero tu cuerpo se niega a hacerlo. Las ganas de estar y seguir y de ser ya no forman parte de vos. Ya no querés ni moverte ni pestañear. Comienzas a dudar si en realidad estas respirando. No querés fracasar, ni triunfar, ni siquiera zafar. Ya no querés. Tan solo piensas en olvidar lo que fuiste y despreocuparte de lo que va a ser de vos. Solo te importa dejar este dolor que te aprisiona y te encierra, sino podés dejarlo, aunque sea, amarlo.
Un petalo cae sobre tu nariz, otra rosa marchita en tu vida cruzando tu camino. Otra triste desazón... Tu mente se aligera, el pasado es ahora y el futuro ya fue... tiemblas y te estremeces, el ahora se volvio muy distante pero, tu niñez y lo que creiste que ibas a ser estan juntos de nuevo. Te vuelves a sentir ligero como una pluma y te imaginas como serás cuando seas un bebé. El presente pasó hace tanto que apenas lo recuerdas.
Todo termina en el comienzo al igual que el fin desemboca en el nudo...

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